La iglesia de Zelená hora perteneciente a la lista de los monumentos de la UNESCO fue bendecida nuevamente. La iglesia barroco-gótica de San Juan de Nepomuk en Žďár nad Sázavou, vuelve a ser no sólo un lugar turistico sino también un templo para los creyentes.
Ahora la gente podrá disfrutar de este lugar sagrado. Después de una pausa de casí cinco aňos por la reconstrucción de la iglesia volverá a prestar servicios religiosos a los habitantes de la zona.
La iglesia ha sido otra vez bendecida,lo cual permite que se puedan volver a celebrar misas regularmente
La fachada de la iglesia de Zelená Hora y las ventanas han sido toatalmente reparadas, y nuevamente decoradas. Mientras que los cinco altares del templo y las baldosas decorativas de la iglesia fueron renovadas en varios tonos para darle más vistosidad a las paredes
La iglesia de Zelena Hora está inscrita en la UNESCO
La iglesia siempre se ha destacado por ser en un lugar de peregrinación, diseñada hace más de tres siglos por el arquitecto Jan Blažej Santini-Aichl.
La iglesia es un edificio único por tener forma de estrella. Por eso se ganó un espació de reconocimiento a nivel mundial. La UNESCO en la decada de los 60 la declaró Patrimonio Mundial de la humanidad
.El templo, que durante la era comunista estaba en manos del estado, pero la Iglesia Católica lo volvió a recuperar hace solo siete años. Este monumento actualmente cumple su 300 aniversario de consagración, pero cabe destacar que este ańo lo ha hecho con una nueva apariencia.
La reapertura
La reapertura ceremonial tuvo lugar el 23 y 24 de octubre y estuvo acompañada de varias visitas guiadas. También hubo varias misas para los lugareňos y varias orquestas corales se presentaron.
«Espero que este lugar no sea solo un lugar de peregrinaje para ustedes, sino que también se convierta en un lugar hermoso para visitar», dijo František Laštovička, el coordinador de las reparación de la parroquia.
En los próximos años se llevarán a cabo las obras de reconstrucción del claustro en forma de estrella de diez puntas, que solía servir a los peregrinos para descansar y pasar la noche. Pero ahora se espera que se convierta en un lugar turistico.