Limpiar el mundo para nuestros hijos es un deber moral.. Este fue un slogan que utilizaron en 2020, un grupo de estudiantes que recolectaron 87 toneladas de baterías del medio ambiente.
El programa de reciclaje escolar Recyklohraní profundiza el conocimiento de los estudiantes en el campo de la clasificación y del reciclaje de los desechos. Cin este proyecto los jóvenes pueden aprender lo perjudicial que son para el medio ambiente los desechos de las baterías y pequeños equipos eléctricos.
Este aňo podrán participar niňos y jóvenes en el proyecto, “Limpiar el mundo”
Los niños de las guarderías, así como los alumnos de primaria y secundaria desde este aňo podrán participar, Después de recibir unas clases informativas. Durante las lecciones, obtendrán mucha información práctica y hábitos para que aprendan a respetar el medio en el que habitan.
El programa Recyklohraní o Limpiemos el mundo funciona en la República Checa desde 2008. Es un programa que trata de ensaňarle a los niños como cuidar el medio ambiente. La interesante es que el aprendisaje se hace en forma de juegos temáticos, concursos, actividades prácticas o proyectos más pequeños.
Ekoabeceda un material didectico para el profesor
Los profesores tienen a su disposición un conjunto didáctico de temas que están divididos que se llama Ekoabeceda,
Ekoabeceda es un juego que esta dividido en 6 niveles. Por otro lado cualquier persona interesada puede descargar este juego de forma gratuita de las páginas web de Recyklohraní.
Uno de los pilares prácticos fundamentales es la recogida de baterías usadas y pequeños equipos eléctricos. Las escuelas involucradas en el programa recibirán contenedores de recolección. Cuando tengan bastante baterias para botarlas se les proporcionará un transporte gratuito para que puedan deshacerse de los desperdicios.
El año pasado se recolectaron 87,3 millones de toneladas de baterias
El año pasado, logramos seleccionar unas respetables 87,3 toneladas de baterías usadas. De esta cantidad, posteriormente se salvaron más de 56 toneladas de materias primas secundarias, como hierro, manganeso, cobalto, níquel, cobre o incluso plata y logramos evitar que se contaminaran varios kilómetros de terrenos baldíos.
Se puede obtener una gran cantidad de metal a partir de baterías usadas, que servirán aún más. Fuente de la foto: Recyklohraní
Los alumnos y estudiantes de la iniciativa también buscaron nuevas formas de hacer más visible y de apoyo la necesidad de clasificar las baterías. Por ejemplo, propusieron nuevos procedimientos de promoción, contenedores de recogida innovadores o cálculos destinados a reducir el consumo de baterías.
En primavera comenzará una nueva campaña que se está lanzando ahora, la campaňa se extenderá durante todo el mes de marzo. Así que si tienes alguna de las escuelas participantes en tu zona, no dudes en apoyarla en la recaudación.