Los precios de los alimentos han batido récords en los últimos meses. Algunos productos agrícolas se venden en las tiendas por múltiplos de lo que costaban el año pasado. Debido a los altos precios de los alimentos, se creó un grupo interministerial dirigido por el Ministerio de Agricultura que se reunió por primera vez la semana pasada e inició una investigación sobre los precios de los huevos por parte de la Oficina Antimonopolio.
Los alimentos basicos no deben faltar en los hogares checos
Las patatas, la leche y la carne son alimentos básicos que no deben faltar en los hogares checos y pueden comprarse en grandes mercados o directamente a agricultores privados. Si nos fijamos en cuánto cuestan de media estos alimentos en las tiendas, la leche, por ejemplo, ronda ya las 25 coronas checas. Según la Oficina Checa de Estadística, en febrero costaba 24 CZK.
Un kilo de patatas cuesta 16,50 coronas
Un kilo de patatas costaba 16,50. Ahora en las tiendas vale unas 20 CZK. Y el azúcar, que era un 80 % más caro a principios de año y, según las estadísticas, costaba unas 30 CZK en febrero, es ahora 10 CZK más caro. El azúcar en terrones cuesta casi el doble.
Por supuesto, los productos también varían según la marca y el fabricante. La diferencia de precio de la misma variedad de manzanas en dos tiendas distintas es de casi cinco coronas.
«Los precios de los alimentos en las estanterías reflejan los precios de los productores agrícolas primarios, los costes y el margen de beneficio. Los costes de almacenamiento, los costes de transporte y, sobre todo, los costes y el margen de beneficio de las grandes cadenas de supermercados se rflejan en los precios. Por estas razones, es difícil predecir la evolución futura de los precios de los alimentos en la República Checa». Declaró Barbora Pánková, portavoz de la Cámara Agraria de la República Checa.